La historia de Paiarrop comienza en el campo, en L’Alcúdia (Valencia). Amalio Vallés, hijo y nieto de labradores, aprendió desde niño a amar la riqueza de la tierra y la grandeza de sus frutos junto a su padre, más conocido en el pueblo como “Paiarrop” debido a su pasión por este excelente y tradicional producto local (Arrop) el cual, junto con un trozo de pan (Pà), le servía al padre de Amalio para endulzar las duras labores del campo.